Negocios y tecnología
Cada vez más nos sumamos a la digitalización y las nuevas maneras de vivir, por tal razón los comerciantes tienen que adaptarse tanto a las tendencias de consumo, como a las formas en que los individuos compran.
Las exitosas plataformas tecnológicas usadas de manera masiva en Colombia y otros países, pronto pasarán a la historia, por lo menos tal como las conocemos. No obstante, en zonas donde el desarrollo ha sido esquivo como es el caso de los municipios del Occidente Antioqueño estas empresas ni siquiera han alcanzado a asomarse y las ideas emprendedoras locales no han tenido éxito hasta ahora.
Se trata de plataformas intermediarias que conectan las empresas o personas que venden sus productos y servicios con los clientes usando aplicaciones móviles, una idea de vieja data, pero que no había tenido el impulso tecnológico y quizás financiero que le dio grandes compañías como UBER, quien inició como una discreta empresa en el 2.011 pero creció de manera exponencial hasta convertirse en un gigante de la tecnología.
La versión colombiana de grandes plataformas tecnológicas nace en Medellín con Rappi y se convierte en referente y ejemplo para Latinoamérica del emprendimiento y crecimiento empresarial; me atrevería a expresar que no hay conferencia sobre emprendimiento o tecnología que no mencionen esta marca que en el 2.019 estuvo valorada en más de 3.000 millones de dólares, sin duda un gigante corporativo en la región.
Si bien los grandes medios y la industria ven como un ejemplo de desarrollo y bienestar estos fenómenos, este inmenso poder está soportado bajo dos pilares o causas principales, la tecnología (lo cual aplaudo y valoro) y la necesidad y precarización económica de la población quienes son los proveedores principales de estos modelos de negocio representados en los pequeños comerciantes necesitados de vender y los millones de desempleados que tienen o adquieren un medio de transporte para producir dinero lo antes posible. El desarrollo de estos modelos de negocio global le lleva mucha ventaja a las normativas y leyes de los países, situación que aprovechan para “nadar” en medio de los vacíos jurídicos y regulatorios.
Razones para no usar estas grandes plataformas por parte de comerciantes y consumidores:
- Especulación de precios. las plataformas son quienes controlan las tarifas subiendo o bajando a su propia conveniencia.
- Deudas sin responder. Muchos dueños de negocios han tenido pésimas experiencias con estas plataformas domiciliarias, pues aunque sus clientes pagan a la plataforma, se presentan casos en que estas empresas no les transfieren el dinero a los comerciantes.
- Compartir espacio con miles de negocios más hace que se tenga que invertir mucho más dinero en promociones o bajar precios para competir con otros.
- Poca recompra. Este indicador es muy bajo en estas plataformas, pues los clientes finales pocas veces encuentran un negocio específico cuando ellos quieren, pues es el algoritmo el responsable de darle sugerencias de compra y resultados de búsqueda.
- Enriquecer a grandes compañías con los servicios propios. A pesar de que el producto principal es el que el comerciante produce u ofrece, estas plataformas se quedan con un gran pedazo del pastel de tu trabajo e inversión.
- No hay control del servicio. Desde que un domiciliario recoge el producto, ya es la plataforma quien responde por la mercancía y servicio, dejando este importante aspecto en manos de personas desconocidas.
- Mala reputación de los negocio por incumplimiento de un domiciliario. Si un pedido no llega o el domicilio lo estropea, el cliente final estará molesto con el negociante, no con la plataforma por la cual compró.
- No se tienen bases de datos de clientes y compras. La información de “tus clientes” no está disponible por lo que no es posible hacer gestiones CRM para desarrollar la clientela.
Hay otra cantidad de desventajas y aspectos negativos como la precarización laboral, falta de responsabilidad social, el poco control de los repartidores o conductores, evasión de responsabilidades laborales e impuestos, contrato civil con desconocidos, ocupación y saturación del espacio público y sigue la lista.
Algunas formas de hacer negocio crecen tan rápido y sin importar consecuencias (solo ganancia$) que así mismo son sus caídas, al aumentar sus críticas y bajar su uso, igual bajará sus cifras en valorización. Ya en Colombia se habla de la salida de varias plataformas, ya sea por disminución de su uso o por normatividad, como el caso de UBER el 31 de enero de 2020. A esto se suma que nos encontramos en una era donde todo es rápido y llegan innovaciones de manera abrumadora.
LA NUEVA TENDENCIA.
Por momento, lo que ha llegado para quedarse han sido las redes sociales, por esto la mayoría de negocios tienen su principal componente tecnológico de mercadeo en Facebook, Instagram y WhatsApp, por ello se debe seguir canalizando las ventas por estos medios, sin embargo ocasionalmente es necesario tener un componente de valor que mejore la experiencia de usuario y optimice sus ventas, una alternativa que ha generado tendencia entre los comerciantes es el uso de un sistema de pedidos propios donde el comerciante tenga el control total de todo el proceso de venta, que el cliente pueda ver catálogos sin distracciones y pueda de una vez hacer el pedido de manera fácil, incluso, si lo prefiere pagar a través de su celular.
Por: Ing. Jaime Hernán Tejada - Data management e innovación
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