Hoy el periódico El Colombiano nos sorprende con este gran cubrimiento que hace de la situación actual de nuestro municipio, de cara a los efectos que nos viene dejando la pandemia.
Noticia nacional, podría definirse esta crónica que registra uno de los principales diarios del país y el más leído por los antioqueños. Es que el titular y foto principal de suportada de este martes 23 de junio muestra la hermosa Santa Fe de Antioquia solitaria en pleno puente festivo, que de no ser por la pandemia, serían los fines de semana de vacaciones de mitad de año, donde se atiborraba de turistas, épocas de ocupación plena de la capacidad hotelera y visitantes por todos lados comprando y consumiendo en los negocios locales.
A continuación, la noticia registrada por el periodista Mateo Isaza Giraldo de El Colombiano, hoy martes 23 de junio de 2020.
Santa Fe de Antioquia extraña los avatares del turismo
Como si fuera una nueva final entre los dos equipos de fútbol más tradicionales de Antioquia, el pasado 8 de junio hubo una disputa de colores en pleno parque principal de Santa Fe de Antioquia: algunos comerciantes colgaron banderas rojas en sus negocios y la administración municipal respondió con una enorme bandera verde y blanca, de más 70 metros, que aún se ondea en la fachada de la Alcaldía, ubicada en una de las esquinas del parque.
Lejos de representar una contienda deportiva, el contraste de colores reveló una tensión que se siente al recorrer las empedradas calles del centro histórico y evidenciar las afectaciones que deja en la economía del municipio un periodo de más de tres meses de encierro y falta de turismo.
Fruto de ese grito de auxilio de los comerciantes hubo un diálogo con la administración municipal, en cabeza del alcalde Felipe Pardo, que implicó la puesta en marcha de un plan para la reapertura de locales comerciales. La estrategia comenzó el pasado 12 de junio e incluye el estricto cumplimiento de protocolos, en horarios entre las 6:00 a.m. y las 9:00 p.m. y con un pico y cédula, que permite que un día circulen las cédulas pares y al otro los impares.
El silencio agobiante
Es viernes, víspera de puente festivo, y buena parte de los encantos del parque principal de Santa Fe están a la vista: la fuente y los árboles frondosos dan una sensación de frescura y los jardines están florecidos y son cuidados por un ejército de pajaritos coloridos.
No hay fiesta, tampoco música ni las tradicionales mesas con sombrillas para que los visitantes se sienten y degusten un helado o una cerveza fría.
En los pocos negocios abiertos hay promociones que regalan tapabocas por la compra de un pollo asado y el único comercio con perifoneo que rompe el silencio del parque principal es un minimercado que, como si se tratara de un capricho del destino, se llama El Turista, lo que tanto invocan por estos días.
“Bienvenidos al cementerio”, dice Maria Isabel Pineda, una de las empleadas del almacén Suyo que está ubicado en otra de las esquinas del parque. La mujer resume en tres palabras el sentir de un pueblo acostumbrado a vivir del turismo y que hoy sufre la falta de visitantes. Muchos negocios están abiertos, pero la venta se redujo a lo que puedan comprar los 30.000 habitantes que tiene el municipio.
Un panorama similar vive Misael Ríos (52 años), quien es uno de los 200 mototaxistas que hay en Santa Fe. “La afectación es grande porque si antes en una jornada con turistas nos hacíamos $50.000, ahora a duras penas llegamos a $25.000 y podemos trabaja día por medio. Así es difícil comer y pagar arriendo”, contó.
Capacidad limitada
Felipe Pardo, alcalde de Santa Fe, admite que la situación es compleja porque según proyecciones oficiales cerca del 70 % de la vocación económica del municipio en la zona urbana depende del turismo.
Allí hay 53 hoteles y hosterías registrados (que siguen cerrados) y 1.400 locales comerciales entre restaurantes, bares, tiendas, distribuidoras de alimentos e insumos agropecuarios. En condiciones normales estos tres puentes festivos eran considerados temporada alta.
“Hemos liderado la entrega de 10.500 paquetes alimentarios y asumimos el pago de servicios públicos durante abril y mayo para los estratos 1, 2 y 3. Es difícil porque Santa Fe de Antioquia es mucho más que las 25 cuadras patrimoniales y hay un tema de hambre que preocupa”, dice.
En la Santa Fe rural persiste una vocación agrícola y la economía se concentra en la siembra de café y frutas. En gran medida esas actividades hacen que la economía circule en el municipio y que se generen ingresos con los que sobrevive el pueblo más allá de las ayudas estatales. La apuesta es fortalecer esa vocación mientras se reactiva el turismo regional y nacional.
A pocas cuadras del parque principal está el café - restaurante La Comedia. Allí su propietario, Ovidio Sánchez, ha tenido que innovar para mantener el negocio a flote a pesar de las restricciones y la falta de visitantes. Por ahora vende almuerzos a domicilio en hojas de bijao y próximamente habilitará el servicio de librería. Por ahora no piensa cerrar.
Como si fuera justicia poética en La Comedia, que ahora solo tiene una botella de alcohol para desinfectar, retumba un estribillo en la voz de Gustavo Adrían Cerati: “despiértame cuando pase el temblor”.
En definitiva
Santa Fe de Antioquia le gana la batalla a la covid-19, hasta el momento solo tuvo un caso y ya está recuperado, pero sufre la falta de turistas por el cierre de fronteras.
Fuente original: https://www.elcolombiano.com/antioquia/santa-fe-de-antioquia-apuesta-al-agro-mientras-vuelven-los-turistas-PA13205758